Monday, February 09, 2009

El contenido de un corazón.

Aire,
para que refresque el calor.
Una canción,
para que ahogue el sonido de la soledad.
Recuerdos,
como testigos de una travesía.
Voces,
como la pelusa y el relleno.
Un pedazo reservado,
que ni el tiempo ni la voluntad ocupa.
Un espacio libre,
celoso, incompleto.
Letras,
que fluyen y sanan y llueven y hablan.

Y una válvula de escape, que el tiempo ha atrofiado.

1 comment:

Daniel Read said...

A la verdad lauris sigues impresionandome con tus escritos de verdad nunca nunca dejes de sonar di que se apgue la yama de tu inspiracion no le hagas casos a lo comments inutiles como este solo sigue escribiendo y nunca pares de escrubirr